Era un soleado medio día de primavera del viernes 12 de noviembre de 1972, cuando el triste ulular de la sirena indicaba la ocurrencia de un siniestro, emergencia que afectaba la casa de material ligero signada con el Nº 371 de la Av. Concepción, inmueble que era consumido por las
llamas. La cercanía ente el lugar de residencia del mártir Víctor Villarroel Kuzman y el lugar siniestrado fue motivo para que el joven voluntario fuera de los primeros en llegar al inmueble afectado cooperando junto a vecinos a sofocar las llamas circunstancia en la cual, tal vez por falta de experiencia fue alcanzado por los cables eléctricos calcinados que se desprendieron de lo alto de la vivienda afectada. Cuando minutos después llegó el carro de la 1ra. Compañía al lugar amagado con un reducido número de voluntarios, al mando del Capitán Don Alberto Pergolessi Vega se impusieron de la infausta tragedia.
Después de ser velado en el cuartel de la 1ra. Compañía, a las 11 horas. Del día domingo 14 de noviembre en la Parroquia Inmaculada Concepción se efectuó una misa, para posteriormente en romería la Compañía doliente, acompañada por numerosas delegaciones de todos los Cuerpos de Bomberos de la Región Metropolitana, llevaron al primer mártir del Cuerpo de Bomberos de Colina, voluntario de la Bomba Colina, Víctor MANUEL Villarroel Kuzman, hasta su última morada. Cabe señalar que por error en la lápida del nicho donde descansa el mártir, por error dice: 12 de noviembre de 1972, debe decir 12 de noviembre de 1971.
Cabe señalar que el mártir por su edad era aspirante, pero se le dio la calidad en forma póstuma para que fuera considerado mártir de bomberos de chile.